El gobierno de México, a través de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC), y en coordinación con el gobierno de Baja California, y del municipio de Tijuana, concluyó la operación del refugio temporal para personas migrantes “El Barretal”, ante el descenso de población.
“El Barretal” funcionó por cerca de 60 días, a partir de la actual administración, y proporcionó condiciones de bienestar para cerca de 2 mil 500 centroamericanos, quienes recibieron alimentación, atención médica, asistencia legal y seguridad, a través de una mesa interinstitucional en la que participaron los tres órdenes de gobierno, organizaciones nacionales e internacionales y la sociedad civil.
De las 70 personas que permanecían al 29 de enero, cabe detallar, algunos de ellos solicitaron el retorno vía terrestre a sus países de origen; otros más se insertaron a la actividad productiva de la ciudad, y otros más fueron recibidos en albergues de la sociedad civil, en lo que esperan su turno para solicitar asilo en los Estados Unidos.
El gobierno de México reconoció el respaldo del gobierno estatal y del gobierno municipal, ya que su participación fue determinante en el impulso de un modelo de gobernanza en donde convergen los esfuerzos de los tres órdenes de gobierno para atender el fenómeno migratorio con una visión más humana y en apego a los derechos de las personas.
Finalmente, cabe comentar, el cierre del albergue se realizó sin incidentes, bajo el acompañamiento de organismos internacionales y de las Comisiones Nacional y Estatal de Derechos Humanos.