Por Mario Ulloa, Especialista en el Desarrollo y Consultoría de Seguridad Pública y Seguridad Nacional para SAS Latinoamérica
Cuando decimos que gracias a los datos podemos cambiar al mundo, es porque vamos más allá en las tomas de decisión; se trata realmente de mejorar este mundo.
Al menos 4,091 mujeres fueron víctimas de feminicidio en América Latina, según los datos de CEPAL en 2020, siendo las tasas más elevadas en el Caribe y Centroamérica. Es importante mencionar, que según este estudio la violencia feminicida está presente durante todo el ciclo de vida de las mujeres, aunque se expresa con mayor intensidad durante las edades reproductivas, esto es entre los 30 y 44 años, seguidas de las adolescentes y mujeres adultas jóvenes de entre 15 y 29 años, así también que muchas de las muertes de las mujeres estén asociadas con la violencia de la pareja íntima.
La violencia de género y doméstica es una problemática que aqueja al mundo y es un gran aliciente que los datos se estén usando para el bien. Para mayor muestra un botón:
La Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio de Interior, y su Unidad de Violencia de Género en España han apostado desde 2017 por incorporar analítica avanzada e inteligencia artificial de SAS en la lucha contra la violencia de genero. En su afán por seguir mejorando la protección a los ciudadanos y su ruta de transformación digital, se apoyó en tecnologías de punta para realizar una valoración y diagnóstico adecuado en los casos de violencia de género que reciben. El nuevo “agente especializado digital”, la plataforma analítica, apoya a los cuerpos de seguridad en esta ardua tarea que va desde el análisis de grandes cantidades de datos hasta la automatización de procesos que consumían recursos humanos, que ahora se pueden asignar a la labor protectora de manera más eficiente, pasando por un nivel de especialización en la categorización, clasificación y dictaminación inicial de un caso de violencia de género de manera confiable
En España, la apuesta de la Secretaría de Estado de Seguridad representa un gran avance puesto que la analítica permite hacer una gestión más proactiva de los casos iniciales reportados, así como aquellos de reincidencia y ayuda a los cuerpos de seguridad a hacer una mejor asignación de recursos de acuerdo con el grado de riesgo de la víctima.
Uno de los retos iniciales consistió en reunir a las diferentes instituciones públicas que tienen competencias en materia de violencia de género, y así integrar toda la información disponible y que agregaba valor al proceso, sin embargo, el principal objetivo fue unificar esa información histórica para mediante procesos de inteligencia artificial y aprendizaje maquine (machine learning), el proceso de analítica implementado generará un diagnóstico adecuado y certero sobre cada caso. De esta forma, se ha logrado en territorio español proteger las mujeres con medidas adecuadas, prevenir nuevos actos de violencia y gestionar el nivel de seguimiento del riesgo. En una sola frase: cuidar a las mujeres.
El resultado en la ejecución ha sido extraordinario, ya que el Sistema de Violencia de Género (VIOGEN) tramita alrededor de 50 mil nuevos casos cada año y ha logrado reducir tiempos para el cálculo de nuevos modelos, de 30 días a 1 día, así como mejorar la predicción para la clasificación del riesgo alto pasando del 38 al 80 por ciento; esto último significa que aquellas denunciantes en inminente peligro tienen la certeza que el diagnóstico será el correcto y los recursos de protección serán usados de manera eficiente; así también han disminuido la recurrencia para los casos clasificados en la franja de riesgo no apreciable, pasando del 14 a menos del 10. Ambos factores combinados mejoran la asignación de recursos policiales (muy limitados) y tecnológicos a los sitios con mayor reincidencia.
El feminicidio hoy en día puede ser combatido mediante el uso de tecnologías analíticas y de inteligencia artificial y machine learning, ya que permiten mantener un enfoque híbrido considerando toda la información disponible y así optimizar el modelado de probabilidad de riesgo y reincidencia, además de lograr una mejora en la predicción para la clasificación y toma de acciones.
Este es realmente un proyecto integral de responsabilidad social que tuvo como premisas el mostrar, concientizar y demostrar cómo los datos y la analítica avanzada pueden ayudar a luchar contra la violencia de género. Sin duda, el resultado es una visión que ayuda a los gobiernos a realizar actividades de priorización y prevención.
Vayamos juntos en esta ardua lucha contra la violencia de género, descubriendo los hallazgos más relevantes de las estrategias de los gobiernos de la región para así, no sólo identificar las redes de violencia, aplicar la justicia y darles atención, sino también crear una red más eficiente de apoyo emocional a las víctimas para así proporcionar una mayor sensación de seguridad para nuestras madres, hijas, esposas y amigas.
SAS Latinoamérica