Como parte del trabajo recopilatorio de fin de año, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), perteneciente a la Coordinación Nacional de Protección Civil, informa los logros en el ámbito de la investigación a lo largo del 2019.
Dentro de los objetivos alcanzados, se destaca la identificación de estructuras geológicas que producen sismos en regiones de los estados de Nuevo León (Linares), Veracruz (Benito Juárez) y Nayarit (Rosa Morada). Esto permitirá a la población conocer recomendaciones de reforzamiento y mantenimiento de las viviendas para hacerlas menos vulnerables ante la sismicidad local, con lo que se mejora la seguridad y se reducen los riesgos en caso de un sismo.
Por otro lado, fue posible homologar los planes operativos de Puebla, Morelos, Tlaxcala y Estado de México respecto al volcán Popocatépetl, y del Volcán de Fuego en Colima y Jalisco, con lo que se facilitan las evacuaciones ante una emergencia. Para la homologación de los planes se realiza un acompañamiento continuo y se brindan asesorías técnicas, contemplando las características de los diferentes peligros, derivados de la actividad de los volcanes.
La difusión del conocimiento resultado de la investigación desempeña un papel preponderante para el CENAPRED, por lo que se organizó en octubre un coloquio para conmemorar el vigésimo aniversario del desastre por inestabilidad de laderas de Teziutlán, Puebla. En este evento se revisaron los avances, retos y lecciones aprendidas desde un enfoque de la Gestión Integral del Riesgo y se hizo énfasis en el nivel de marginación y el alto grado de vulnerabilidad que caracteriza a las comunidades asentadas en zonas propensas a este tipo de peligros.
Asimismo, se impartieron cinco cursos formales de inestabilidad de laderas en el CENAPRED y varios estados, así como 30 pláticas sobre la misma temática. Se estima que con estas acciones se beneficiaron al menos 800 personas.
Respecto al análisis permanente de ciclones tropicales, frentes fríos, lluvias, entre otros, se emitieron recomendaciones oportunas sobre el impacto de estos fenómenos en las zonas más vulnerables, especialmente por inundaciones y laderas inestables. Estas recomendaciones son enviadas al Centro Nacional de Comunicación y Operación (CENACOM), de la Dirección General de Protección Civil, que a su vez los envía a las autoridades locales competentes de acuerdo a las características de la emergencia.
Se elaboraron 42 mapas de inundación a escala local, municipal y estatal, para que las autoridades los utilicen en el ordenamiento del territorio y la planeación urbana. Se construyeron nueve mapas de la ciudad de Peribán de Ramos, Michoacán; tres mapas de la presa Emilio López Zamora, Ensenada, Baja California; tres mapas de la ciudad de Guamúchil, Sinaloa; seis mapas de la presa Canseco, Catemaco, Veracruz; 12 mapas del río San Pedro, Nayarit; tres mapas de la ciudad de Matehuala, San Luis Potosí; tres mapas de la ciudad de Culiacán, Sinaloa; y tres de la ciudad de Monterrey, Nuevo León.
Se ofreció capacitación sobre evaluación de seguridad en viviendas y edificios a mil 300 participantes en 88 municipios de los estados de Jalisco, Oaxaca, Colima, Chiapas, Guerrero, Michoacán, Veracruz, Morelos, Puebla, Querétaro, Guanajuato y Estado de México, considerados los de mayor vulnerabilidad en el país. Lo anterior, como resultado de las reuniones de fortalecimiento que se llevaron a cabo a principios del año, en las que se acordaron asuntos como la capacitación a las autoridades locales.
Finalmente, el CENAPRED participa activamente en el desarrollo de diversas normas, una de ellas concierne a la Norma Oficial Mexicana de Seguridad Estructural de Edificaciones Hospitalarias para la Prevención de Desastres, cuya justificación técnica fue elaborada para su envío a consulta pública. Esta norma constituirá una base sólida del programa Hospital Seguro y Resiliente.
Este trabajo ha permitido conocer mejor el origen, comportamiento y consecuencias de los fenómenos naturales y antropogénicos; además, incidir en el desarrollo tecnológico, en la identificación de peligros, en la disminución del riesgo de desastres, alertamiento y fortalecimiento de la cultura de la protección civil.