El fenómeno de la inseguridad obliga su análisis desde múltiples perspectivas, para conocer la forma de actuar ante los riesgos derivados de algún atacante intencionado, ello recae dentro de lo que en inglés se conoce como security.
Debemos considerar que, no obstante, los eventos y escenarios donde los accidentes y desastres naturales tienen lugar, nos recuerdan que existe otra seguridad a la que es preciso poner particular y mayor atención: la delsafety.
Cuando se presentan los denominados “fenómenos perturbadores”, es decir, los acontecimientos provocados por la naturaleza (sismos, huracanes, inundaciones, etc.) o el ser humano (accidentes, derrames químicos, incendios, entre otros) que provocan un impacto negativo al sistema social y al hábitat, nos damos cuenta de que muchos poseemos una incipiente cultura de protección civil.
En México se han llevado acciones, creado sistemas, instituciones y surgieron diversas organizaciones, a raíz de los sismos de 1985, que han logrado contribuir a la seguridad de las personas, muchas familiarizadas ya con los protocolos de seguridad en caso de emergencias.
A más de 3 décadas podemos decir que estamos mejor preparados y somos menos vulnerables, en el país, ante este tipo de adversidades.
Debemos reconocer, no obstante, que existen enormes áreas de oportunidad y que la cultura de la seguridad ha sido, es y será siempre, una constante sobre la que debemos trabajar a nivel familiar, comunitario, escolar, laboral y social.
Muchos de nosotros participamos en los simulacros y ejercicios que tienen lugar, con frecuencia, en diversas instalaciones, no obstante, ¿cuántos de nosotros podríamos responder afirmativamente a alguna de las siguientes preguntas?
¿Cuenta tu hogar con un plan familiar de protección civil?
¿Has tomado algún curso básico de primeros auxilios?
¿Tienes en tu hogar un botiquín de emergencia completo?
¿Has instalado, en tu casa, detectores de humo?
¿Cuentas en tu casa con un extintor contra incendios?, ¿lo saben utilizar?
Los accidentes y los desastres, desafortunadamente, suceden en cualquier momento y no ofrecen, con frecuencia, segundas oportunidades. Muchas de las afectaciones son irreversibles o dejan secuelas o marcas de por vida.
Bien vale la pena que pongamos hoy sobre la mesa, dejando a un lado el “security”, al “safety” y consideremos que podemos y debemos hacer mucho en materia de protección civil, aprendiendo y educando a todos a nuestro alrededor.
Para ello, considera la lectura de los recursos que tiene disponible el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred – México), Elabora tu Plan Familiar de Protección Civil y ¿Sabes que hacer en caso de…?, así como los documentos ¿Está listo? Una guía completa para la preparación ciudadana y Preparación para casos de desastre para personas con discapacidad y otras necesidades especiales elaborado por la Federal Emergency Management Agency.
Por David Lee
ASIS INTERNATIONAL