Un artículo de Diginomica de octubre de 2020, “Don´t be a sheep – challenge the call to re-platform ERP (No seas una oveja: desafía el llamado a la reprogramación de ERP)” del autor Brian Sommer, contiene algunos consejos pragmáticos para los CIOs que sienten la presión de trasladar el ERP a la nube.
No es necesario reemplazar o cambiar la plataforma de aplicaciones de “back-office” importantes, pero no diferenciadoras, como el traslado de ERP a la nube, si no existe razón comercial para hacerlo.
Aunque los proveedores de ERP están impulsando fuertemente sus nuevos productos, mover ERP a la nube o extraer y reemplazar ERP no es un cambio revolucionario. Por lo general, son los proveedores los que se benefician de trasladar la funcionalidad ERP central al ERP en la nube u otro producto, o al actualizar estos sistemas maduros.
“Las ‘extracciones de paquetes’, en las que se cambia una aplicación por otra con una funcionalidad materialmente similar, rara vez son ventajosas”, afirma Sommer en el artículo. Funciones como la publicación de entradas en el diario no suelen ser estratégicas para la empresa. A menos que se esté utilizando un sistema ERP realmente roto, es probable que no exista un valor estratégico para la empresa al trasladar el ERP a la nube o cambiar el núcleo a un nuevo proveedor o una nueva línea de productos, en la nube o sin ella. Sin embargo, el proveedor se beneficia al tener un cliente menos al que brindar soporte en una versión anterior y, en el caso de una actualización al producto más nuevo del mismo proveedor, un cliente más en el recuento base instalado para su nuevo producto.
“Los proveedores quieren ver … que se realicen actualizaciones, ya que el soporte de esas soluciones antiguas puede ser costoso”, ofrece. Seamos claros, los proveedores quieren esto porque normalmente les resulta caro tener a mano el personal y la experiencia necesarios para respaldar las versiones anteriores. “… El costo para los clientes es lamentable”, postula Sommer. Los clientes aún pagan el mantenimiento (generalmente una gran parte de su presupuesto de TI) por los nuevos productos después de un cambio. No será necesariamente menos costoso para los clientes actualizar, especialmente una vez que se tengan en cuenta los costos del cambio (por ejemplo, implementación, readaptación, integración y capacitación).
No es necesario trasladar ERP a la nube, como SaaS, a menos que exista una buena razón comercial para ello.
“Pocas soluciones verticales poseen IoT (internet de las cosas) enriquecido y otra tecnología avanzada para implementar, procesos de manufactura innovadores”, dice Sommer. Esto habla de algo más que una cuestión de paridad funcional para requisitos de cumplimiento regulatorio, específicos de la industria o únicos. La clave aquí es que hasta que las empresas realmente transformen la forma en que se realiza el trabajo y requieren sistemas que puedan respaldar dicho trabajo, hay pocas “novedades” que las soluciones verticales puedan ofrecer además del potencial. Sommer afirma: “Los proveedores y los especialistas en marketing de los proveedores a menudo carecen de historias reales de transformación empresarial.” – probablemente porque están en la punta del iceberg de la próxima generación de transformación empresarial habilitada por la tecnología.
Según menciona el artículo: “… los clientes gastarán mucho dinero en este momento y un monto adicional desconocido en el futuro, por recibir algo sin un valor definido”. Los requisitos para transformar un negocio aún no han sido definidos, por lo que los proveedores no pueden incorporar las funcionalidades que se requieren en sus productos. Durante los siguientes años, manténgase al tanto de la evolución de los productos hasta llegar a un punto en el que las plataformas y los productos pueden ofrecer soluciones innovadoras para “la nueva normalidad” en los negocios. Mientas se llega a dicho punto, plataformas y tecnologías se implementarán y se experimentará con ellas, luego nuevos procesos de negocios serán creados de entre las nuevas posibilidades, conforme los líderes de negocios van entendiendo lo que es posible. Esto creará requisitos mínimos con los que los proveedores pueden trabajar para entregar productos con funciones que sean verdaderamente útiles. Aún no es claro qué funciones tendrá el software empresarial de la siguiente generación.
Algunas empresas de TI e integradores de sistemas están promoviendo agresivamente el primer paso [cambio de plataforma]. Estos proyectos se presentan como primeros pasos críticos y necesarios para un nuevo futuro digital”, escribe Sommer. Sin embargo, estas iniciativas de alto costo y menor valor no producen una mejora comercial perceptible. Muchos están condenados al fracaso simplemente por la falta de cambios visibles. Otros fracasarán debido a la falta de pensadores futuristas (líderes empresariales y / o ingenieros) que utilicen la plataforma para crear el modelo de negocio transformado.
Aproveche un modelo de TI híbrido para enfocar el presupuesto y los recursos en sistemas de participación que respalden la estrategia comercial
Sommer ofrece: “La primera pregunta que los CIOs deberían hacerse es: ‘¿Podemos delimitar el ERP antiguo y hacer nuestras iniciativas transformadoras con tecnología nueva / que no sea ERP?’”. Esto es clave. Reducir el alcance de lo que está en la definición de ERP central. Nutrirlo y mantenerlo. No gaste mucho tiempo y dinero cambiándolo. Déjelo funcionar como la máquina bien engrasada que es. “Las nuevas soluciones deben centrarse en resolver los problemas de hoy (y de mañana), no los de antaño”, afirma. Absolutamente, cree un entorno de TI híbrido que permita la inversión donde puede haber valor estratégico para el negocio. Aproveche esta oportunidad para repensar cómo funciona el negocio e invertir en nuevas formas de hacerlo posible. Aún comprará y venderá, creará cuentas por cobrar y pagará por cosas, así que deje el ERP solo, omita la transición al ERP en la nube y deje que su ERP procese ese tipo de transacciones como fue diseñado.
“Aquí hay un costo de oportunidad asociado con estos proyectos de cambio de plataforma”, sugiere Sommer. Los costos de cambio de ERP pueden ser bastante altos. Estos fondos, recursos y tiempo podrían emplearse mejor en iniciativas de TI híbridas que promuevan los objetivos comerciales, impulsen el crecimiento o permitan la transformación.
“Los proveedores te empujarán a menos que te defiendas. Las citas puntuales son una especie de ultimátum”, confiesa finalmente el autor. La experiencia es que los licenciatarios de software se enfrentan a esta presión casi todo el tiempo. Al irrumpir en la industria del software hace más de una década al crear la categoría de soporte de software empresarial independiente, Rimini Street ha tenido, desde entonces, un asiento de primera fila en este mundo dinámico dentro de TI.
Los licenciatarios deben recuperar el control de sus planes de negocio de sus aplicaciones y aliviar la presión de los proveedores para trasladar el ERP a la nube o para cambiar la plataforma. El soporte independiente crea un beneficio mutuo: menores costos de mantenimiento y liberación de fondos, recursos y tiempo para invertir donde la empresa debe ir.