Con el propósito de dar a conocer el panorama de la seguridad en el sector del transporte en nuestro país, Jorge Hagg, director de Expo Seguridad México y Expo Seguridad Industrial, participó en el panel “Transporte seguro: reto creciente y estrategias ante el COVID-19”, organizado por SITL Americas, evento enfocado a mostrar soluciones, productos y tecnología para la logística y transporte.
El panel de especialistas, que fue moderado por Elías Gamboa, Director Transport and Logistics Events de Reed Exhibitions, contó con la participación de Jorge Hagg y expertos como Enrique González, presidente nacional de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga; Gilberto Palomares, director general de Transportes Pitic; Eduardo Téllez, Supply Chain & Transport Protection de Liomont; y Vicente Roqueñi López, director de Asuntos con Gobierno y Espectro de Motorola Solutions, Norte de Latinoamérica y el Caribe.
El director de Expo Seguridad México abordó el panorama de inseguridad que afecta al transporte de carga en nuestro país, y mencionó que, en principio, se debe considerar que el gasto de seguridad pública en México del 2018 al 2019 fue, en promedio, del 1% del PIB y que, del total del presupuesto, el 70 % es destinado a dos ejes: Fuerzas armadas en apoyo a la seguridad pública y a la impartición de justicia, reclusión y adaptación, y solo el 1.5% es destinado a la atención a los derechos humanos.
“Hay que hacer notar que, debido a la inseguridad que se presenta en el país, el sector privado debe invertir el 5% de sus ingresos en protección y seguridad privada, que al final son recursos que se podrían destinar a capacitación o a tecnología. Pero también, ha crecido el mercado de la seguridad, en donde operan aproximadamente 600 mil elementos en diversas corporaciones de seguridad privada, aunque solo 400 mil están registrados en la Dirección de Seguridad Privada”, comentó Hagg.
En ese sentido, indicó que el sector de las compañías de protección privada, reporta un crecimiento anual de 20%, y ahora se están contratando más servicios de blindaje, una alarma o por lo menos un guardia de seguridad, lo que equivale a un 2% del PIB. “Es un mercado que tiende a expandirse, pero esa situación presenta al mismo tiempo los retos de formalizar al 40% de las empresas de seguridad que laboran de forma irregular, avanzar en la profesionalización, regionalización y cobertura del sector, promover la creación de un marco jurídico especial para el sector, y buscar aclarar el rol de las empresas de seguridad en el abatimiento de los altos índices de seguridad”.
Por otro lado, Hagg se refirió a uno de los principales delitos que se presentan en el país, como es el caso del transporte de carga, cuyas mayores cifras se presentan en algunas entidades del centro de la República, principalmente en los municipios de Ecatepec, Tlanepantla, Tecamachalco, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl y Cuautitlán Izcalli, en el Estado de México, con 42% de incidencias; seguido de Puebla, con 17.8%; Guanajuato, con 8.3%; Michoacán, con 7.1%; Jalisco, con 5.9%; Veracruz, con 4.7 %; e Hidalgo, con 3.1%, entre varios otros estados.
“Las cifras son contundentes; los delitos no paran y muestran una tendencia creciente. Por ejemplo, entre octubre de 2013 y septiembre de 2019, el robo de tractocamiones de diferentes tipos de carga creció 101%, y aunque más de la mitad se logró recuperar (AMIS), el daño alcanzó 11,571 unidades. Relacionado con este segmento, la PGR ha informado que durante el 2018 se decomisaron 21,757 unidades usadas para el trasiego del combustible, aunque cabe señalar que ese delito ha disminuido de 70 mil barriles diarios a cinco o seis mil durante la actual administración”, especificó Jorge Hagg.