En la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), preocupados por la confirmación del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) de que el Producto Interno Bruto de México (PIB) se contrajo 0.1 por ciento en 2019, la primera caída anual desde 2009, propone acciones concretas para impulsar y reactivar la economía mexicana.
El INEGI confirmó este 25 de febrero que la economía cayó 0.1 por ciento el año pasado, el primero del Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y registró una disminución de 0.4 por ciento en términos reales en el cuarto trimestre, en comparación con el mismo lapso de 2018. Con la revisión realizada por el INEGI, se mostró que cada trimestre del año anterior la producción cayó respecto del período inmediato anterior, lo que implica que México ha estado en recesión técnica de abril a diciembre de 2019.
Considerando cambios anuales en la clasificación por esfera económica, la producción primaria -incluida la ganadería, pesca, caza y aprovechamiento forestal-, alcanzó un crecimiento de 2.0 por ciento. En tanto, la producción total de los servicios y el comercio apenas alcanzó una expansión de 0.5 por ciento. Por su parte, la producción de las actividades secundarias, que incluyen las industrias manufactureras, de la construcción, minería y actividades energéticas, disminuyeron 1.8 por ciento en comparación con 2018.
Asimismo, el desempeño de nuestra economía contrasta con el crecimiento del PIB de Estados Unidos, que fue de 2.3 por ciento en 2019. Esto refleja que la caída en el Producto Interno Bruto de México responde en gran medida a cuestiones internas que se detallan a continuación:
1. Reducciones en la confianza del sector privado. 2. La disminución de la confianza ha afectado la inversión y nos ubica en niveles similares a la recesión económica de 2009. 3. Fuerte deterioro del sector construcción. 4. Desaceleración de uno de los principales motores de la economía: el consumo. 5. Se han experimentado caídas en los niveles de comercio. 6. El subejercicio y la falta de inversión por parte del gobierno afectó el dinamismo de la economía.
Por otra parte, expertos estiman un rango de crecimiento de 1% a 1.3% para la economía mexicana en 2020. Este crecimiento se explica por un “efecto rebote” después del pésimo desempeño que se registró en 2019.
Además, atribuyen una mejora en el desempeño de la economía debido a, uno, la reactivación del sector construcción, y, dos, al acuerdo que finalmente se consiguió para el TMEC, cuya incertidumbre había paralizado a la inversión desde la entrada de Donald Trump al Gobierno de EE.UU. en 2016.
Sin embargo, si alguno de estos dos elementos se retrasa, podríamos esperar reducciones en las perspectivas de crecimiento en los próximos meses. Ante esto, en la COPARMEX proponemos 6 acciones concretas que se pueden llevar a cabo para impulsar la economía:
1. Mejorar la confianza empresarial será pieza clave para revertir la perspectiva negativa de la economía mexicana.
2. Una decisión clave para la economía del país será permitir la inversión privada en el sector energético. Esto implicará, uno, reducir la incertidumbre en el sector y mandar señales de confianza al sector privado en general, y, dos, quitar presión en finanzas públicas. Hacia adelante no es posible que el Gobierno sostenga a Pemex sin poner en riesgo las finanzas públicas.
3. Capitalizar el aumento en el poder adquisitivo de los trabajadores para revertir el estancamiento del consumo. La confianza del consumidor también ha registrado caídas en los últimos meses con respecto al año anterior. Para esto será fundamental mejorar las condiciones de seguridad y dejar de lado el discurso divisorio.
4. Aprovechar el debilitamiento del comercio entre China y EE.UU, sobre todo ante el contexto de la aprobación del nuevo TMEC. México es el mejor posicionado para aprovechar la oportunidad de comerciar más productos con EE. UU y fortalecer el rol que ha tomado como principal socio comercial a partir del 2019.
5. Reactivar la construcción será fundamental para recuperar el ritmo de creación de empleos. Aunque en la economía en su conjunto no se perdieron empleos, hubo sectores en los que sí se destruyeron empleos como la minería y la construcción. En el caso de la construcción, se registró una destrucción de 13,170 empleos.
6. Evitar los subejercicios que frenan la actividad económica y la generación de empleos. Ejercer el gasto de forma eficiente será crucial para reactivar el sector construcción y a la economía en su conjunto.
COPARMEX considera, sin duda, que crecer entre el 1 y el 1.3 por ciento no es suficiente. Por un lado, se aleja de la meta de crecimiento del Gobierno Federal del 4 por ciento, y, peor aún, implicaría un debilitamiento en términos del PIB per cápita. Por ello la Confederación exhorta a la presente administración a implementar acciones concretas para reactivar e impulsar la economía de México.