“Sin el control del contrabando de armas no es posible cerrar el círculo vicioso que es: armas, capacidad de fuego, crecimiento de las organizaciones criminales, narcotráfico, lavado de dinero y finalmente la diversificación criminal que termina por afectar en lo que más lastima a la sociedad, que en caso de México son los asaltos, secuestro, extorsión y todo gira alrededor de la disponibilidad de un arma”, aseguró el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, durante la reunión Binacional de Planeación y Seguridad Fronteriza.
En el marco del Grupo de Alto Nivel en Seguridad México-Estados Unidos, el secretario Alfonso Durazo, acompañado del comisionado adjunto de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, Robert E. Pérez; y el embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, así como del director general de Asuntos Especiales de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Julio César Sánchez Amaya, señaló que en el combate al tráfico de armas de Estados Unidos hacia México se pueden alcanzar mejores resultados.
“Yo creo que tenemos que cambiar la visión sobre lo que representa la disponibilidad de un arma en la generación de todo el círculo vicioso de la inseguridad. Yo veo que el primer eslabón de ese círculo vicioso es la disposición de un arma y ahí deriva el resto de acciones que desembocan incluso en la demanda de droga y en la muerte de nuestros jóvenes”, aseguró el secretario Alfonso Durazo.
Planteó que existe una relación de maniobra extraordinaria con Estados Unidos, la cual calificó de histórica, ya que aseguró que: “aquí está el compromiso, la capacidad para poner sobre la mesa propuestas de solución. Hay condiciones históricas para que a diferencia de otros esfuerzos, este sí dé resultados. Hay una relación extraordinaria entre nuestros respectivos gobiernos y hay una voluntad reiterada, palpable de colaborar en todos los ámbitos pero particularmente en el ámbito de seguridad”.
En su oportunidad el comisionado adjunto de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP), Robert E. Pérez, expresó la importancia de la colaboración con el gobierno mexicano para alcanzar un éxito real ante los desafíos que actualmente se presentan.
“El éxito en cualquiera de estos desafíos se puede notar, en mi opinión, cuando todos trabajamos codo a codo como sea humanamente posible, sabiendo nuevamente que la base de esos esfuerzos es compartir valores, compartir visiones, y áreas de importancia en cada una de las responsabilidades que tenemos, no solamente a los juramentos que tomamos, sino también al servicio público que proveemos a los increíbles ciudadanos de ambos países”, expuso el funcionario norteamericano.
Al tomar la palabra el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, precisó que desde el pasado 8 de octubre se ha trabajado con el subgrupo de tráfico de armas, sobre todo en cuatro importantes fenómenos que afectan ambas naciones.
“Tenemos como naciones que compartimos una frontera común, un reto mayúsculo en nuestras fronteras con estos cuatro fenómenos que van íntimamente relacionados, narcotráfico, tráfico de armas, lavado de dinero y tráfico humano, por esa razón desde el gobierno de México se ha insistido en colocar en el centro de la agenda bilateral el tema de tráfico de armas”, refirió el subsecretario de Seguridad.
El embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau, destacó que se pueden alcanzar mejores resultados ya que existe un interés genuino entre ambas naciones para enfrentar este flagelo.
“Sabemos que ninguno de nuestros países está seguro cuando el otro, no lo está, y precisamente la frontera es el espacio común en donde más intensa debe ser nuestra cooperación, la seguridad es un desafió compartido y una responsabilidad compartida. Por muchos años los grupos criminales han aprovechado nuestros desacuerdos históricos al respecto, este tipo de encuentros demuestran que los señalamientos quedaron atrás, porque aquí no solo fomentamos la cooperación y el trabajo conjunto, sino que también comprobamos que existe un diálogo genuino entre nuestros países”, añadió el diplomático estadounidense.
Por su parte el director general de Asuntos Especiales de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Julio César Sánchez Amaya, en representación del canciller Marcelo Ebrard; destacó que el comisionado interino de Aduanas y Protección Fronteriza de E.U. Mark Morgan, respaldó el despliegue operativo que el gobierno de México lleva a cabo para prevenir el tráfico de armas en la frontera en seis puntos estratégicos en la frontera: Tijuana, Nogales, Cd. Juárez, Nuevo Laredo, Reynosa y Matamoros, con la intención de ampliar en breve a 20 puntos de inspección fronteriza.
“Nuestra cooperación parte del entendimiento de que ambos países somos corresponsables de atender las causas y efectos de grandes retos de seguridad, como el flujo de drogas de sur a norte y el tráfico ilícito de armas y de dinero de norte a sur”, aseveró Sánchez Amaya.
El tráfico ilícito de armas de fuego amenaza la seguridad y los intereses tanto de México como de Estados Unidos, por lo que resulta esencial atacar este fenómeno de forma conjunta, con el único objetivo de proteger la vida, la seguridad y la integridad de los ciudadanos en ambas naciones.