La lista de amenazas a la seguridad incluye el robo directo, desde ladrones de tiendas al azar hasta delitos de minoristas organizados y empleados deshonestos, así como pérdidas accidentales y desviación de productos. Y los problemas digitales tampoco son una preocupación menor, dado los ataques de alto perfil como el respaldo de tarjetas y el robo de datos a través de redes inalámbricas.
Los requisitos reglamentarios y de cumplimiento, junto con la necesidad de que las empresas se protejan contra los daños y las pérdidas de ingresos, hacen que el encargado de la estrategia de seguridad emplee una mejor protección contra las amenazas de seguridad. En general, las organizaciones siguen siendo vulnerables y necesitan hacer más para hacer frente a la amplia gama de amenazas de seguridad.
Las empresas minoristas enfrentan un paisaje lleno de amenazas crecientes y cada vez más complejas. Y el impacto financiero de estas brechas está aumentando.
Lograr un equilibrio entre la protección de activos y datos y la creación de lugares de trabajo productivos e innovadores ha desafiado a los profesionales de la seguridad durante décadas. La verdad es que no existe tal cosa como estar 100 por ciento seguro. Se deben tomar decisiones difíciles en torno a los diferentes niveles de protección necesarios para diferentes partes del negocio.
Con el tema “Actualización del modelo de seguridad para tiendas y restaurantes: ¿Qué hay más allá de la tecnología?” el Ing. Gonzalo Enrique Alamillo González nos dio a conocer la necesidad de retar los modelos actuales de supervisión y monitoreo y lo importante de tener como objetivo la evaluación completa del sistema de seguridad, dejando atrás la idea de invertir e instalar solo elementos disuasivos.
El Ing. Alamillo comentó su opinión de la implementación de un CCTV, “las cámaras no son ni algo que evite ni disuada el robo.” Hoy en día son herramientas consideradas como un apoyo de evidencia o como apoyo a documentar lo que ha sucedido.
También comento que el robo, se quizás el delito más fácil de evitar. Únicamente poniendo los medios adecuados y unas simples precauciones se puede reducir los riesgos considerablemente, ya sea a nivel retail o restaurantes.
Además nos compartió cuatro consejos básicos:
- Disuade al delincuente
- Retarda el ataque
- Detecta anticipadamente
- Comunica rápidamente
Gonzalo Enrique Alamillo González es un profesional con 25 años de experiencia en seguridad corporativa, es experto en gestión de crisis y por mucho tiempo ha sido responsable del desarrollo de equipos para el manejo de emergencias corporativas.
Es Ingeniero Industrial por el Instituto Politécnico Nacional y a lo largo de su carrera ha trabajado con diferentes tipos de empresa como el automotriz, manufactura, energía, químico, informático, de distribución, logística y retail.
Ha colaborado con empresas como Renault-Nissan, General Motors, 3M México, IBM México, Ingram Micro, British Petroleum México entre otras.