Derivado de los trabajos desarrollados por agentes de la Policía de Investigación, con apoyo de peritos en materia de genética y criminalística, se resolvió un caso de homicidio calificado ocurrido el pasado 16 de julio en agravio de una adolescente de 17 años, golpeada en numerosas ocasiones, agredida sexualmente y privada de la vida mediante asfixia, por un hombre de 40 años que dejó el cuerpo de la víctima al interior de una cisterna en un deportivo para después huir.
Los hechos se registraron en la colonia Carlos Zapata de la delegación Iztacalco, cuando el indiciado y la ofendida se encontraban en la cisterna vacía, lugar donde se presume que la adolescente recibió los golpes que presentaba su cuerpo. Asimismo, de acuerdo con la mecánica de lesiones, el agresor ejerció presión con el antebrazo izquierdo a la altura del cuello hasta provocarle la muerte.
Policías preventivos fueron notificados por habitantes de la zona de la presencia del cuerpo de la adolescente, el cual fue reconocido por sus familiares en el lugar de los hechos. El dictamen en criminalística y medicina forense arrojó que el cadáver pasó entre 24 y 48 horas dentro del contenedor.
El resultado pericial en materia de genética describió que la víctima presentaba características de un acto sexual y había residuos de células epiteliales que coinciden con las del hoy imputado. Con base en la declaración de testigos, se acreditó que la hoy occisa estuvo con el acusado el día de su fallecimiento, por lo que agentes de la Policía de Investigación se dieron a la tarea de localizarlo.
Con todo este cúmulo probatorio, la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio solicitó a un Juez de Control una orden de aprehensión en contra el probable participante, misma que fue cumplimentada por la Policía de Investigación. El juez de control dictó prisión preventiva oficiosa al inculpado, que quedó interno en el Reclusorio Preventivo Varonil Oriente.
De encontrarse penalmente responsable del delito en cuestión, el indiciado podría alcanzar una sentencia de entre 20 y 50 años de prisión.